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Inigualable clausura de las XIV Jornadas de montaña




Cuando Martín Ramos confirmó su presencia  en las jornadas de este año sabíamos que ibamos a tener en La Bañeza a un montañero especial, un ochomilista sencillo con una forma limpia de hacer montaña.


En su segunda visita al Kachenjunga Martín volvía con la intención de subir hasta su cima, de nuevo formaba  una pareja indestructible con Jorge Egocheaba que buscaba finalizar sus catorce ochomiles.
 En su primera visita, año 2012, la montaña descubrió su lado más temible con una avalancha que los arrancó de la ladera de "La joroba" camino del Campo I y los envió de vuelta a España con las manos destrozadas y el corazón pidiendo a gritos  volver allí.
Y fué la expedición del 2014 la que el zamorano nos presentó, pormenorizándonos cada paso dado para llegar a pisar la cima desde los primeros pasos del Treking hasta el día de ataque a cima.
Su forma de compartir la experiencia nos hizo sentir a todos en primera persona el frio que se mete en los huesos, el calor de las gentes de Nepal, el dolor en los pulmones que no encuentran oxigeno, la fatiga continua de un largo acoso a la cima, la alegría de la cumbre.

El codigo moral inquebrantable de Martín y Jorge es envidiable: sin Sherpas de altura, sin ayuda exterior, sin botellas de oxígeno . Una ética razonada : "intentaremos la cima cumpliendo nuestras reglas, sino podemos nos bajamos", sin importarle como suben los demás, sin exigir a nadie nada. Si suben será de esa manera, sino no subirán. Respecto al uso de las cuerdas fijas que los Sherpas de altura de otras expediciones colocan:  la más absoluta sinceridad "naturalmente que las agarramos, llegamos a un acuerdo (compensación económica ) con ellos para utilizarlas....."

Es una forma limpia de hacer las cosas no exenta de riesgos ni dificultades el único plan alternativo si las cosas se ponen feas es bajarse lo más rápido posible.

En resumen una ponencia impresionante de la mano de uno de los mejores montañeros de España ( sin duda).

 La jornada finalizó con la cena anual del Club en la que socios y amigos del Club clausuraron el mes audiovisual y, a falta del Belén de Cumbres, el año 2014 en el que el Club ha continuado su andadura tras 20 años creciendo.